De acuerdo a la plataforma internacional de datos Statista, Bolivia fue el segundo país con más quemas forestales el 2023, sólo por debajo de Brasil.
“Los incendios forestales representan uno de los desastres naturales con mayor repercusión en América Latina. Únicamente en Brasil se contabilizaron aproximadamente 189.900 brotes de incendios forestales a lo largo de 2023, siendo esta la cifra más alta en América del Sur. Con más de 40.000, Bolivia registró el segundo mayor número de incendios forestales en la región ese año”, indica el reporte que fue publicado hace unos días.
Luego se ubican Venezuela, Argentina, Paraguay, Colombia, Perú y Chile, que ocupa el octavo lugar, pero que en estos días sufre un dramático embate de los incendios, que han dejado más de 100 fallecidos.
En el otro extremo se encuentra Guyana Francesa, que tuvo 372 incendios forestales, el número más bajo entre los Estados de Sudamérica.
“En el centro del problema de los incendios forestales se radica en la deforestación como técnica utilizada para expandir el área de cultivo y pastizales. Con el incremento de los brotes, la deforestación en la Amazonia ha visto un crecimiento continuo por casi una década”, agrega el informe de Statista.
Bolivia vivió el año pasado una incontrolable ola de incendios, que consumieron cultivos y algunas casas de los indígenas, además de amenazar a poblaciones muy pobladas, como San Buenaventura.
Finalmente, la lluvia llegada de noviembre apagó los incendios, dejando una huella de destrucción sobre todo en Beni, Santa Cruz y norte de La Paz.
El Gobierno informó que se habían quemado 2,6 millones de hectáreas, por debajo del 2022, cuando ardieron más de 4 millones de hectáreas.
Si bien el informe de Statista habla de 40 mil incendios en Bolivia, el CEJIS hizo un reporte al finalizar la etapa de las quemas basado en el reporte oficial, en el que consignó 357.428 focos de calor, aunque es una categoría diferente a incendio.