Son al menos 19 representaciones diplomáticas en Ginebra, Suiza, que recibieron esta semana información sobre las vulneraciones a las libertades fundamentales y los derechos humanos en Bolivia, de parte de la Coalición Nacional de Organizaciones de la Sociedad Civil sobre los Derechos Humanos para el Examen Periódico Universal (EPU) de Bolivia.
El pasado 19 de noviembre, organizaciones de la sociedad boliviana se presentaron a una presesión ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ginebra para exponer sus informes alternativos sobre derechos humanos y las libertades fundamentales en Bolivia, en el marco del mecanismo EPU, que permite evaluar los avances en estas materias en cada Estado cada cuatro años y medio.
La Unión Nacional de Instituciones para el Trabajo de Acción Social (UNITAS), como parte de la coalición, además tuvo reuniones bilaterales con representaciones diplomáticas para exponer la situación de las libertades de expresión, de prensa, de reunión pacífica y de asociación, además de las personas y organizaciones defensoras de derechos, y la ausencia de una ley para el acceso a la información pública en Bolivia.
“De las temáticas que hemos planteado a las representaciones diplomáticas, la libertad de prensa y la libertad de asociación han sido las que más han sorprendido por los datos, por ejemplo, los datos de cierres de ONG y la situación que atraviesan los periodistas y las mujeres defensoras en Bolivia. Como una cuestión que engloba a todo es el tema de la impunidad. Es algo que preocupa”, informó desde Ginebra la coordinadora del programa de Promoción y Defensa de Organizaciones Defensoras de Derechos de UNITAS, Claudia Terán.
Los países que recibieron esta información, tanto en la presesión como en reuniones bilaterales con UNITAS son: Alemania, Argentina, Austria, Bélgica, Canadá, Colombia, Corea del Sur, Dinamarca, Chile, Chipre, Estonia, España, Estados Unidos, Ecuador, Finlandia, Francia, Irlanda, México y Reino Unido. Además de estas delegaciones, UNITAS también se reunió con representantes de dos mecanismos de Naciones Unidas.
“El tema de defensores de derechos humanos es especialmente sensible. Reconocen que no siempre hay suficientes datos disponibles, y esto refuerza la importancia de nuestras investigaciones para brindar un contraste a la narrativa oficial que suelen manejar los Estados”, acotó Terán.
UNITAS, que fue una de las seis organizaciones oradoras en la presesión, resaltó el apoyo de la Red Internacional de Derechos Humanos (RIDHE) para alcanzar estas reuniones bilaterales.
Las presesiones son espacios para que organizaciones de la sociedad civil puedan informar a los representantes de los Estados recomendantes sobre la situación de los derechos humanos en el Estado examinado antes del EPU, con el fin de que recojan información de primera mano.
El EPU es un proceso que permite la revisión periódica del cumplimiento de las obligaciones de los Estados en materia de derechos humanos en los países miembros de Naciones Unidas. El Estado boliviano debe presentarse a su cuarto EPU en enero de 2025.