Sumando Voces
Como sucede con diversas organizaciones sociales de Bolivia, la Federación Regional Única de Trabajadores Campesinos del Altiplano Sur (FRUTCAS) también enfrenta divisiones internas y tensiones promovidas por el Movimiento al Socialismo (MAS). Así lo hace notar el exdirigente de la Central Única Provincial de Comunidades Originarias de Nor Lípez, Juan Wilson Morales Fernández, quien revindica la independencia de las organizaciones sindicales y la defensa del litio para su región.
En entrevista con Sumando Voces, Morales Fernández denuncia que su organización y FRUTCAS han perdido el norte porque “los dirigentes se dedican más al tema político que a buscar temas reivindicativos de nuestra provincia Nor Lípez”.
Indica que su organización pertenece a FRUTCAS y que en el pasado esa entidad luchaba por los recursos naturales, por el agua, por el tema del litio, pero que el año 2021, el expresidente Evo Morales y el exministro Juan Ramón Quintana llegaron a la zona para hacer “un golpe orgánico sindical”, que ha derivado en la expulsión de la dirigencia orgánica aduciendo un tema de transfugio, pese a que esa figura política no existe en la vida sindical.
Tras esos hechos, ha quedado en la dirigencia la señora Yamile Cruz, quien a su vez ha sido desconocida el 13 de agosto por la dirigencia de FRUTCAS, que ahora da su respaldo al presidente Luis Arce y David Choquehuanca.
“Ratificamos el apoyo contundente e inclaudicable a nuestro presidente Luis Alberto Arce Catacora y vicepresidente Jilata David Choquehuanca Céspedes por la política de industrialización del litio, recurso natural que pertenece al sudoeste potosino por la reactivación económica de nuestro Estado Plurinacional de Bolivia y rechazamos toda generación de caos y desestabilización política por parte de la derecha interna y externa que solo genera desestabilización a la economía boliviana”, señala el pronunciamiento de FRUTCAS publicado por Arce en su cuenta de Twitter este fin de semana.
Esta división de las organizaciones ocurre en el marco de una profunda fractura entre el ala evista y el ala arcista del MAS, que también ha dividido en dos a la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB).
“Ahorita estamos en una pulseta política por quién va a ser el candidato, ese no es el camino adecuado para una organización sindical, las organizaciones sindicales tienen que mantener su independencia político sindical, buscar los temas reivindicativos sociales que necesitan las comunidades”, señaló el exdirigente Morales Fernández, quien pertenece a la comunidad de Pozo Cavado.
En medio de esta pulseta, la dirigencia de la CSUTCB que responde a Evo Morales anunció un bloqueo de caminos desde el 4 de septiembre exigiendo que se le entregue la sede de la organización, que ahora está en manos del ala arcista.
Al respecto, el exdirigente de Lípez recuerda que el Evo Morales ha promovido las organizaciones paralelas, como sucedió con FRUTCAS. “Evo es parte de la división, no vamos a decir que es un santo, he visto en carne propia cómo ha dividido la FRUTCAS”.
Señala que muchas comunidades de Nor Lípez han caído en este juego, lo que impide por ejemplo la aprobación de un proyecto para el aprovechamiento del litio o el establecimiento de una autonomía indígena en la zona propuesta por las organizaciones de base.
