Vivo en la ciudad del humo

Opinión

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Sumando Voces

Carolina Méndez Valencia

Vivo en la ciudad del humo, en una tierra que arde y en un cielo que se ahoga,

vivo aspirando lo que venden como progreso y le llaman “modelo de desarrollo”

inhalo smog de agronegocio y exhalo polución de pirómanos criollos.

Vivo en la ciudad del humo que no deja ver futuro,

que pregona modernismo mientras aniquila el presente.

Vivo en la locomotora de Bolivia que envenena la vida

y pulveriza la esperanza para alimentar la codicia.

Vivo en la ciudad adormecida que ama la impostura y las consignas

pero que es indiferente a la devastación ecocida.

Vivo en la ciudad sofocada que se cree tierra elegida

pero que es tierra devastada.

Vivo en la república de la soya donde se sellan los pactos patriarcales

del empresariado racista con los gobernantes cómplices.

En el terreno machista donde confluyen logias, iglesias y fraternidades.

Vivo en el terruño que agota a sus campos y despoja comunidades

mientras pierde su condición de tierra de oportunidades.

Vivo donde se crían vacas para exportar a China

a costa de bosque, agua, aire, silencio y agonía.

Vivo bajo el «cielo más puro de América»

en la tierra extractiva de sequías e incendios homicidas

donde el despojo y la inequidad no se van con plaguicidas.

Vivo en la tierra que sufre en silencio ante la usurpación

y está cansada de la sobrexplotación

la que se ahoga y tose con tanto humo

mientras alberga a la sociedad de consumo.

Vivo en la patria de la intoxicación

donde abundan las poses de libertad y redención

en la zona de sacrificio agroindustrial

que tiene la venia de todo el poder estatal.

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Carolina Méndez Valencia es periodista.

Las opiniones de nuestros columnistas son exclusiva responsabilidad de los firmantes y no representan la línea editorial del medio ni de la red.

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