Giselle, víctima de feminicidio en Cotoca. Foto: RRSS
Santa Cruz fue escenario de dos feminicidios en un solo fin de semana. Las víctimas, de 24 y 38 años, murieron presuntamente a manos de sus parejas. Según declaraciones de familiares, una fue golpeada hasta la muerte y la otra fue asfixiada. La Policía aprehendió a los sospechosos y continúa con las investigaciones. De acuerdo con datos de la Fiscalía General del Estado, entre el 1 de enero y el 14 de abril de 2025 se habían registrado 26 feminicidios en el país. Sin embargo, se registraron otros seis casos más hasta la fecha, con lo que el dato final llegaría a 32.
Una de las víctimas, Giselle, de 24 años, vivía en el municipio de Cotoca junto a su pareja y su hija de cuatro años. Según la familia, la relación —que duraba cinco años— estaba marcada por constantes peleas. La joven fue trasladada a un centro médico tras el ataque, pero llegó sin signos vitales. El personal médico no logró reanimarla y denunció el hecho a la Policía. Su pareja fue detenida.
El segundo caso se reportó en el barrio El Bajío del 6to anillo, también en Santa Cruz. Maritza, de 38 años, vivía con su concubino. Según la fiscal asignada, Rose Marie Barrientos, el hecho ocurrió la medianoche del domingo. Informó que el hombre llegó a su casa a altas horas de la noche, por lo que la mujer le reclamó. Ante ello, el agresor asfixió a la víctima y, tras el crimen, llamó a los vecinos para que lo ayudaran a llevarla al hospital. La mujer ya no tenía signos vitales cuando llegó al centro médico, según información de El Deber.
La pareja de la víctima es el principal sospechoso, por lo que fue enviado al penal de Palmasola con detención preventiva por 180 días. «Yo la encontré así, mi esposa estaba en el piso, cabeza abajo, lo que hice es auxiliarla, yo no sabía lo que había pasado y nadie sabía nada. Yo estaba llegando de trabajar yo soy un triste pintor y soldador que estaba ganándome mis centavos», dijo el principal sospechoso ante los medios de comunicación. Además, pidió que revisen las cámaras de seguridad para ver quién o quiénes ingresaron a su domicilio.
El comandante departamental de la Policía de Santa Cruz, Raúl Rojas, confirmó que los presuntos autores ya fueron detenidos. “Lamentablemente ayer se recibió el reporte de la FELCV (…) En ambos se activaron los protocolos de investigación y se ha puesto a los sospechosos a disposición del Ministerio Público”, declaró.
Al respecto, la directora de la Casa de la Mujer, Paola García, manifestó que Bolivia está de luto ante la muerte de estas mujeres que murieron de forma violenta. «Son nuevas víctimas no sólo de sus agresores, sino del machismo y del patriarcado en este país. Y las víctimas cada vez son más jóvenes, eso nos tiene que llamar la atención y mirar qué está sucediendo, qué hay detrás de los feminicidios», expresó.
Lamentó que las autoridades de los distintos niveles del Estado sigan haciendo «oídos sordos», pese a que está ampliamente documentado que Santa Cruz es el departamento con mayor número de denuncias por violencia y el segundo con más feminicidios en Bolivia. “La alerta por violencia contra las mujeres se ha quedado solo en el discurso de la Ley 348”, sostuvo García. Añadió que, lejos de fortalecer las políticas públicas, se están recortando los recursos destinados a la atención de género generacional, lo que impide frenar esta escalada de violencia.
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