La escasez de reservas internacionales netas, la subida del precio del dólar paralelo y las filas para conseguir combustibles son las señales más palpables de que la economía atraviesa por una “situación límite” y, frente a eso, los analistas Gonzalo Chávez, de Maestrías para el Desarrollo, y René Martínez, de la Fundación Jubileo, coinciden en que el Gobierno debe sincerarse ante el país, recortar el gasto fiscal, sobre todo en las empresas públicas, además de adoptar otras medidas urgentes para revertir esta situación.
Chávez, en una columna publicada este domingo en diversos medios, sugiere a los operadores del Gobierno que “salgan de frente del espejo. El narcisismo económico no es bueno. Pedir ayuda no es malo”.
Y, tomando en cuenta que uno de los orígenes del problema de la escasez de dólares “está en el enorme déficit público que se tiene desde hace 11 años, es hora de reducirlo”. Por eso, propone “el recorte de gastos superfluos como propaganda, viajes y otros”, además de racionalizar la inversión pública, mostrando las cifras verdaderas, puesto que este ítem no pasa de los 2 mil millones de dólares, mientras que en el Presupuesto figura con 4 mil millones de dólares.
“Aunque les duela su corazoncito ideológico, evalúen y cierren algunas empresas públicas deficitarias. Esto ayudará sólo a ahorrar algunos bolivianos, pero dará una buena señal a los mercados. Paren proyectos faraónicos para los cuales no tienen dinero. Por ejemplo dejen de anunciar 150 nuevas empresas estatales”, sugiere el analista.
Por su lado, el René Martínez, en una entrevista con Erbol, pidió sinceridad en “este momento extremo”.
“Lo peor es no hacer nada y por otro lado negar la situación, porque al negar la situación se está cerrando la posibilidad de implementar políticas, cambios urgentes y que tengan aceptación en la población”, dijo.
Coincidió con Chávez en sentido de que se debe recortar el gasto público analizando qué cosas funcionan y qué cosas no funcionan en el modelo económico.
“Esta apuesta por las empresas públicas es una de las principales causas de la caída de las reservas internacionales, hemos utilizado parte de las divisas en una apuesta por las empresas públicas y todos sabemos cómo ha terminado eso. Lo peor es que ahora siguen apostando por crear más plantas”, dijo Martínez. Por tanto, comentó que, como “no hay recursos, hay que corregir”.
Martínez también apuesta a modificar el tipo de cambio. “La línea que debió seguir el Gobierno es que, una vez que acabó la bonanza de los recursos naturales, debió ir ajustando gradualmente el tipo de cambio, como antes sucedía a través del Bolsín”,
Agregó que “ahora estamos en esta crisis, tarde o temprano hay que ajustar el tipo de cambio”. El analista Martínez habló de “una situación límite”,
Otras medidas
Gonzalo Chávez también propone cobrar 4,8% de impuestos a los cooperativistas auríferos, cortar “los salarios fabulosos de algunos burócratas de las empresas estatales o de la gestora de pensiones de largo plazo”, encarar “una reforma tributaria para que los nuevos ricos de Bolivia, a saber: cocaleros, grandes gremiales y cooperativistas mineros, paguen un poco más de impuestos”.
También sugiere una diferenciación para la subvención de los carburantes, de tal manera que no beneficie a los cooperativistas mineros del oro, ni a los dueños de automóviles de alta gama.
Y, en otros ámbitos, propone liberar las exportaciones completamente, algo que están pidiendo los empresarios, además de eliminar el impuesto a las transacciones financieras (ITF) y aumentar las tasas de interés en cuentas de divisas.
En el fondo, Chávez cree que se debe cambiar el modelo, pero dice que, como el Gobierno se negará a hacerlo, entonces hace propuestas para enfrentar la situación coyuntural.
El Gobierno
El gobierno de Luis Arce, por su parte, afirma que hay suficientes dólares en los bancos para atender a los empresarios y a la ciudadanía, algo que ha sido negado por los gremios empresariales.
“Vemos que la cantidad de dólares en el sistema financiero es suficiente. Evidentemente, tenemos un caso de especulación y se tiene que tranquilizar a la población, estableciendo medidas desde el regulador financiero para que esas transacciones (compra-venta de dólares) se normalicen”, dijo en días pasados el viceministro de Pensiones y Servicios Financieros, Franz Apaza, a Unitel.
El Gobierno además ha negado insistentemente que la falta de combustibles se deba a la carencia de divisas, como sostienen diversos analistas del sector.
Entre tanto, las autoridades han iniciado un ciclo de reuniones con los gremios empresariales para buscar una salida a la escasez de dólares, mientras que algunas importadoras de maquinaria agrícola, de materiales de construcción y de medicamentos informaron a sus clientes que incrementarán los precios hasta el 25%, puesto que deben pagar altas comisiones para la salida de dólares.
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